Recreo en el Bajo: La nueva ruta de panaderías y cafecitos que atrae con aromas y sabores en San Isidro
Para hacer una parada post bici, ir con la notebook a trabajar, pasar a buscar algo rico o, también para sentarse, pedir algo, y esperar a los que se van sumando.
Con árboles añosos, veredas de ladrillos y su encanto barrial intacto, el Bajo de San Isidro propone un circuito de cafecitos y panaderías para tener marcados en el mapa. Aquí, algunas de los lugares que visitamos
Pausa
Los hermanos Luciana, Marcos y Eugenia Rosso forman el equipo que empuja Pausa. Los tres dejaron sus trabajos en relación de dependencia para encarar este proyecto: “Fuimos en búsqueda de algo propio, con corazón. Como familia, siempre tuvimos la fantasía de abrir un café; y como somos de zona norte de toda la vida, decidimos ir por ahí”, cuenta Luciana sobre la cafetería que, a metros de las vías, muestra su cara local: vereda de ladrillos antiguos bajo un enorme árbol y aberturas de época con toldos.
Pausa es un lugar de habitués; muchos eligen su planta alta para el coffee office o hacen vereda entre amigos. Tienen carta de cafetería, té, almuerzo y brunch los fines de semana. Algunos de sus hits: huevo poché y palta con pan de campo; scones de queso; la key lime pie y el açaí bowl. Primera Junta 718. Todos los días, de 10 a 19.30. @pausacafe_
Blu Cafe
La amabilidad se siente en el aire de Blu Café, el proyecto de Agustina Zamudio. Ubicado en una antigua propiedad refaccionada junto a las vías del Tren de la Costa, tiene detalles que dan espíritu de hogar. Por ejemplo, los habitués pueden dejar su propia taza para usarla cuando van, además del beneficio de un 10% de descuento en el café. Una barra de madera restaurada marca la circulación entre los espacios para sentarse en la vereda, el salón y el patio trasero.
Recomendamos probar la cookie de pistacho, el roll de canela y el chipá. También hay carta de almuerzo y brunch, además de pizzas. Es compu y pet friendly. Juan Bautista de LaSalle 441. Martes a viernes de 8.30 a 19; fines de semana de 9 a 19.30. @blucafe.sanisidro
La Valiente
Una típica construcción ferroviaria se transformó en un clásico: La Valiente tiene dos años recién cumplidos, pero pareciera que está acá desde siempre. Esta panadería y confitería fue creada por Christian Petersen, Ezequiel Mendoça Paz y Germán Torres, quien lleva adelante la elaboración diaria. ¿Qué pedir? Las medialunas de manteca son la insignia y los sándwiches no fallan jamás; si no, una porción de torta. Un rack muestra la horneada de pan del día, el alma de La Valiente, ideal para comprar uno antes de partir. Juan Bautista de LaSalle 433. Abre de martes a domingo, de 8 a 19. @lavalientepan
La reforma del espacio fue realizada por la arquitecta Fela Navia, de Ohio Estudio, e implicó mantener los materiales originales –tirantes, paredes, ventanales de vidrio repartido, ladrillo visto–, sumar detalles rústicos (como andamios y madera de obra) y abrir todo al máximo para que la luz natural cruzara todo el local y la elaboración quedara a la vista.
El olor a pan y café recién hecho sale por las ventanas e invita a entrar en esta panadería que ya es célebre en el barrio.
Dock
Durante muchos años, en San Isidro, Luis Salas se dedicó a la restauración y reciclaje de muebles y objetos antiguos. Eso lo llevó, también, a ambientar locales comerciales y a crear proyectos residenciales. Fue para ocuparse de algunas obras que se instaló por tres años entre Ilha Grande y Angra do Reis; antes de partir, guardó todas sus cosas en un depósito sobre la calle Primera Junta. De regreso para visitar a sus seres queridos, lo sorprendió la pandemia; decidió, entonces, abrir Dock, su propia cafetería, con el mismo espíritu del bar de playa en el que desayunaba en Brasil. Tienen también opciones veganas y sin TACC, y algunos especiales que cambian cada semana. Primera Junta 1128, San Isidro. De viernes a domingo de 10 a 20. @dock_cafe
“Mientras no estuve, la zona se había convertido en un polo gastronómico interesante, así que me sumé a la movida”, cuenta Luis
Afines
“Soñábamos con un espacio que nos reuniera, que fuera lindo y con cosas riquísimas. Un lugar para estar cómodos y tranquilos, bien atendidos, para compartir con amigos y familia. Así nació Afines”, recuerda la cocinera Loli Dodds, al frente de la cafetería que abrió en octubre de 2021 junto a tres socios (Belén Alegre −foto−, Nicolás Marcó y Joaquín Malbrán). Ofrecen una propuesta de café de especialidad, y tortas, tostadas y viennoiserie de elaboración propia. También hay carta de brunch para compartir de a 2, que se puede pedir todos los días y a toda hora (un diferencial para aprovechar).
El local tiene una paleta de colores que lo identifica, con diferentes tonos tierra y verde azulado; en combinación con la madera, crea un ambiente que abraza. Don Bosco 361, San Isidro. Para visitar de martes a domingos, de 8.30 a 19.30. @somosafines
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