Reforma sensible: En el edificio Molina Ciudad, un loft urbano con aires de montaña
Arquitecta e ingeniero, los dueños de casa pusieron en juego todo su ingenio y sensibilidad para crear su paraíso cotidiano.
“Un matrimonio con hijos grandes que ya no viven con ellos... y que tienen perros humanizados”. Con humor, como si hablara de un comitente, la arquitecta Andrea Camacho resume las necesidades que debía atender la reforma de su propia casa. El proyecto lo llevó adelante con Binomio Arquitectura & Diseño, el estudio que nació en pandemia fruto de la sociedad con su compañero de ruta, el ingeniero Gregorio López. El resultado describe tanto el estilo de vida de la pareja (viajeros, buenos anfitriones, expertos en disfrute y amantes de la naturaleza) como su filosofía de trabajo: soluciones originales, materiales nobles, funcionalidad y sustentabilidad.
Ubicado en Molina Ciudad, el loft tiene una planta de 100m2 y una terraza de las mismas dimensiones. Así que la reforma comenzó por la planta baja y fue subiendo hasta la suite, donde se dieron todos los gustos. “Para nosotros hogar es refugio -dice Andrea-, y cuanta más naturaleza haya, más se parecerá a ese espacio de calma y de reposo que todos necesitamos”.
"El hall es un espacio de recepción, por eso quisimos crear un clima de calidez y presentarnos con esa imagen que dice ‘acá estamos nosotros, bailando. ¡Bienvenidos!’"
Andrea Camacho y Gregorio López, dueños de casa y creadores de Binomio Arquitectura & Diseño
El paso se abre
Arriba dormitorio y abajo, vestidor: el volumen de chapa oxidada cumplió esas funciones antes de hacer la suite en planta alta; ahora, es estudio y vajillero.
La cocina sumó mobiliario (Binomio Arquitectura & Diseño) y una isla en Silestone negro ‘Tebas’ (Tecno Cuarz) con banquetas ‘Altihla’ tejidas en soga y lámpara ‘Babel’ (todo, Increa).
¿Cocina negra? “Por qué no -pensaron-, el espacio da. Para una casa en el campo elegiríamos algo más fresco, pero esto es un loft urbano”
Espacio integrado
Vista 100% abierta
Andrea diseñó la pérgola de modo tal que puede desarmarla y guardarla en invierno.
Recursos para ganar luz
Una cubierta de vidrio en la caja de la escalera lleva luz al hall y al lavadero, mientras que una lucarna hace lo propio en el baño. “El presupuesto no dio para elegir orientación y usé todos los recursos posibles para traer sol”, cuenta Andrea.
La pared del lavadero ubicado en el bajoescalera está revestida con un jardín artificial de Valyria Home.
Planta alta
"Al estar orientado al sur, el cuarto iba a dejar la terraza en sombra; por eso diseñé el techo de vidrio inclinado y es fantástico: dormir mirando las estrellas es increíble."
Cortinas corredizas motorizadas permiten oscurecer el frente y techo vidriados.
El pequeño office sirve dos grandes propósitos: desayunar en la cama o tomar algo en la terraza.
Antes y después de una maravillosa terraza
“Queríamos todo el combo: un lugar para recibir a nuestras hijas, terraza, parrilla, hogar, plantas… Somos muy afortunados, conseguimos vivir como en una casa en medio de la ciudad”.
El deck plástico suspendido permite baldear y bañar a los perros sin problema. El paisajismo (Ciudad Naturaleza) incluye gramíneas autóctonas de fácil mantenimiento, como así también salvias y hemerocalis.
Plano detallado
Qué se hizo
- Se colocaron pisos de porcelanato y una cubierta vidriada para la escalera, que lleva luz natural al acceso y al nuevo lavadero en el bajoescalera.
- Un entrepiso de hierro con espacio de guardado debajo fue el dormitorio principal y ahora se usa como estudio y cuarto de huéspedes. Ese volumen también delimita el hall de entrada.
- Se amplió la cocina conservando el planteo existente.
- Para el balcón, piso de tablas de hormigón; también incorporaron la parrilla y una pérgola desmontable.
- En el nivel de la terraza, se construyó la suite con vestidor, baño y office, dejando un generoso exterior cubierto con un deck plástico.
Emblema
Gregorio trabajó muchos años en obras de refinería, de ahí su afinidad con el hierro y los espacios de gran escala. Esa inclinación los atrajo a Molina Ciudad, el ex edificio de la textil Alpargatas, y desde ya, se replica en el interior de su hogar.
El estudio Dujovne-Hirsch fue el encargado de convertir la emblemática construcción del barrio de La Boca en este complejo de oficinas y viviendas. Unos 350 lofts industriales que se entregan “pelados”, para ser intervenidos con total libertad. “Ese lienzo en blanco es fantástico para un arquitecto”, dice Andrea.
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