Gesto de diferenciación. Con Lijo bajo la lupa, Villarruel recibió a juezas que piden la presencia de mujeres en la Corte

La vicepresidenta Victoria Villarruel encabezó hoy una reunión con dos juezas y dos senadoras para analizar un proyecto que propone equilibrio de género en la Corte Suprema de Justicia, en momentos en que el presidente Javier Milei impulsa para cubrir vacantes en la Corte a dos hombres, Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla.

Titular del Senado, donde se deben debatir los pliegos de los postulantes, Villarruel se mostró con la senadora cordobesa Alejandra Vigo (esposa del exgobernador Juan Schiaretti), a quien recibió en su despacho. La legisladora asistió acompañada por su par Mónica Silva y por las juezas Susana Medina y Teresa Day, que integran la Asociación de Mujeres Jueces de la Argentina (AMJA), una organización que reclama al Gobierno que proponga presencia femenina para cubrir los lugares disponibles en el máximo tribunal. El gesto pareció una clara diferenciación de la postura del Presidente.

La senadora Vigo difundió la visita a Villarruel en su cuenta en la red social X. La jueza Medina integra el Tribunal Superior de Justicia de Entre Ríos y es presidenta de la AMJA. Day, en tanto, es ministra de la Suprema Corte de Mendoza y una de las directoras de la asociación.

“Acompañé a las juezas Susana Medina (presidente) y Teresa Day, de la AMJA, a la audiencia que nos concedió la vicepresidenta de la Nación Victoria Villarruel para tratar la inclusión de mujeres en la Corte Suprema de Justicia. Especialmente, hablamos sobre el proyecto de ley que presenté semanas atrás que impulsa el equilibrio de género en la CSJ y los tribunales federales colegiados de la justicia de todo el país”, escribió Vigo.

El Gobierno eligió dos candidatos hombres para ingresar a la Corte en lugar de Elena Highton de Nolasco (se jubiló) y de Juan Carlos Maqueda (que este año llegará a la edad límite para los jueces, 75 años). Son Lijo y García Mansilla. El juez federal cosechó numerosas impugnaciones de parte de asociaciones judiciales y dirigentes políticos. Entre esas críticas estuvo la de la asociación a la que recibió hoy Villarruel.

“Solo tres mujeres han integrado el máximo tribunal federal. La Asociación de Mujeres Jueces de la Argentina insta la postulación de una mujer como candidata a suplir la vacancia en el cargo de juez de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, como un paso crítico hacia el cumplimiento efectivo de los mandatos de progreso social y equidad de género”, puntualizó la AMJA en un comunicado que difundió el 20 de marzo, cuando se conocieron las postulaciones de Lijo y García-Mansilla.

La asociación también presentó una impugnación contra los candidatos en los últimos días, con una carta dirigida al ministro de Justicia, Mariano Cuneo Libarona. Denunció “desigualdad estructural” y remarcó: “Los postulantes que se proponen (Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla) tienen 55 y 53 años. Este esquema, donde la magistratura de la CSJN permanece en su cargo hasta los 75 años, decanta en que, por al menos siete años, no habrá representación femenina en el máximo tribunal y se asegura que por los próximos 20 años habrá en la CSJN dos varones”

Medina, en diálogo con LA NACION al día siguiente de la postulación de Lijo y García-Mansilla, afirmó que las mujeres en la Justicia no tienen “solo un techo de cristal para romper –que parece haberse transformado en un techo de cemento–, sino pisos resbalosos y escaleras rotas”. La jueza tuvo otros encuentros con referentes del Gobierno, como Karina Milei (secretaria General de la Presidencia) y Martín Menem (presidente de la Cámara de Diputados).

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