Loft patagónico. Un galpón de diseño con vista a las montañas de San Martín de los Andes
Rondando los 50 años, una pareja eligió este lugar para empezar una nueva vida rodeados de las cosas que aman: la naturaleza, el arte, la decoración, los afectos y la buena cocina.
PARA LA NACION
Los invitamos a visitar nuevamente este loft en San Martín de los Andes que nos encanta desde siempre. Es el hogar del constructor y decorador Willy Sánchez y de su mujer, un proyecto que plasma su plan de vida: en contacto con la naturaleza y generoso para recibir. En una ladera con vista a la cordillera, junto con el arquitecto Pablo Velasco Suárez proyectaron este loft de espacios amplios y cómodos con la forma de un galpón tradicional, estructura de maderas gordas, cabriadas de eucalipto a la vista y una altura que permite que entren la luz y el aire por los ventanales de la planta alta.
Con una pared de piedra, el hall frío es un fuelle entre exterior e interior. En la Patagonia, contar con este espacio es una costumbre y una una necesidad. “Allí nos sacamos las botas con nieve o barro y colgamos todas las camperas en los percheros. Además, tenemos a la vista todas las cosas que disfrutamos, como los esquíes, los equipos de pesca o los palos de golf”.
Un living monumental
“En la casa, esos dos tonos juegan constantemente, tanto dentro como fuera. Es una combinación clásica y elegante que brinda un buen contraste con la madera natural de la estructura principal y de los pisos”, señala el arquitecto Velasco Suárez.
"El primer paso fue preparar el terreno. “Fuimos haciendo el parque con plantas autóctonas que podemos disfrutar en toda la casa, especialmente desde la terraza."
Willy Sánchez, constructor y dueño de casa
El living, el comedor y la cocina se dispusieron en un mismo ambiente sin divisiones y gran parte de los muebles fueron diseñados especialmente por Willy. Aquí también hay detalles industriales como el hierro en la chimenea, la campana de cocina y los herrajes en general.
Cocina bañada de luz
El techo vidriado es un placer para la vista y un lujo porque el sol en la Patagonia es muy preciado: durante cuatro o cinco meses se lo ve poco.
“El espacio de la cocina y el comedor integrados es el ambiente más usado, y dentro de él, el centro está en la barra, donde nos reunimos con amigos. Aunque esté la picada en el comedor, se acercan y se apoyan en las banquetas mientras yo cocino”, nos decía Willy.
Sin dudas, lo más atractivo de este ambiente es el techo de vidrio, un placer para la vista y también para trabajar a gusto.
Escritorio a un lado del puente
En el escritorio hay espacio suficiente como para que dos personas trabajen al mismo tiempo y está equipado con dos divanes que funcionan como chaise longue y cama para invitados, así que se transforma en cuarto de huéspedes si alguien se queda a dormir.
"El puente fue un buen recurso para aprovechar la doble altura. Tiene perfiles de hierro con chapas impresas y tensores de acero inoxidable. La idea era que se viera realmente como un puente de galpón colgado."
Arq. Pablo Velasco Suárez
Cuarto principal
El cuarto principal es la habitación más romántica de la casa. Allí el color se va a los neutros y las formas redondeadas ganan protagonismo.
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